LA MEDITACIÓN
¿ Qué es la meditación ?
La meditación es una práctica con la cual se intenta eliminar las interferencias que existen en nuestra mente y llegar al contacto directo con nuestro ser espiritual.
El ruido que constantemente tenemos en la mente, con nuestro eterno diálogo interno entorpece la conexión con todo lo que es y existe.
La meditación es la forma de ir quitando fuerza a ese diálogo interno, que nos crea un mundo irreal que depende únicamente del pensamiento que tengamos en ese momento, e ir percibiendo al mundo y a nosotros mismos tal como somos: eternos y divinos.
Por decirlo de una forma más cotidiana. Nuestro ser es una radio mal sintonizada, que se mueve en una onda malsana (pensamiento), y que no es capaz de captar las otras ondas porque está demasiado acostumbrado al mismo canal.
¿ Qué es Meditar ?
Meditar es la práctica (por medio de distintas formas que llevan a lo mismo) de la observación del pensamiento, de nosotros mismos, y del mundo que nos rodea, tendente a su correcta percepción
Es decir, normalmente cuando nos surge un pensamiento lo agarramos y deliberamos sobre él, con más o menos dominio sobre su rumbo. Esto fortalece al pensamiento que sólo tiene que surgir en muestra mente para que le hagamos caso. Esto nos lleva a no estar casi nunca en el presente ya que el pensamiento nos aleja de él, llevándonos a caballo entre el pasado y el futuro, sin darnos cuenta de que lo único existente es el momento actual.
Con la observación del pensamiento ( meditación ), cada vez tiene menos fuerza esa onda que nos apartaba del presente y que nos hace imaginar situaciones y mundos que sólo existen en nuestra mente. Con la pérdida de fuerza del pensamiento comenzamos a percibir cosas que antes ( por las interferencias) no percibíamos, y comenzamos a tener más presentimientos, seguridades internas e intuiciones, a la vez que nos sombramos con un presente muy distinto a lo que hasta ahora conocíamos.
Es un trabajo arduo, no es fácil, pero merece la pena.
¿ Formas de meditación ?
Existen múltiples formas pero podríamos englobarlas en dos: Meditaciones puras: Son aquellas que observan el cuerpo, pensamientos, sonidos y demás manifestaciones del mundo, apreciándolas sin juzgar, simplemente... observando.
Es la autentica meditación y entre ellas podemos destacar algunas como el Zen que es la meditación por excelencia.
Zen: consiste (a grosso modo) en observar la respiración en una postura de loto, con la espalda erguida y con un estado de quietud interno y externo. La postura puede variar, incluso se puede práctica sentado en una silla, lo importante es la observación de la respiración como paso para llegar a nuestro ser interior.
Otras: - Observar nuestro cuerpo, recorriéndolo de arriba a abajo, interna y externamente. - Escuchar los sonidos, ruidos, el silencio. - Observar la naturaleza. Etc.
Meditaciones inducidas: Son las que van visualizando parajes relajantes, situaciones confortantes, etc. con las que se va adquiriendo un estado de relajación profundo que nos alivia de tensiones y nos reconforta. También se crean (en la mente o astral) situaciones a ocurrir en un futuro, sanaciones, realizaciones materiales, etc.
Se les llama meditación pero realmente salen fuera de ella. Existen infinidad de métodos. Sólo hay que imaginarse una situación agradable, y enfocarla para conseguir algún fin.